ASPACE Madrid Por Patricia Pimentel
Cristina Martin de Francisco (1992) acaba de publicar su primera novela “Tú también puedes volar” (Meiga Ediciones), una preciosa historia en la que se narra la vida cotidiana de una adolescente con parálisis cerebral. Una lectura imprescindible para todos los afectados por esta discapacidad y para los que no lo están. Un relato ameno en el que nos sentimos identificados todos los que, como ella, vivimos “sobre ruedas”.
Un libro magnífico que engancha desde su primera página.
Cristina es graduada en Psicología por la UCM en 2014 con un máster en Victimología (2016) y un máster en Estudios de Género (2018) Además de colaborar en ASPACE Madrid gestiona su propio blog “Un diván en el salón” con reseñas culturales desde un punto de vista psicológico. Además, ha escrito numerosos relatos.
-¿Cuándo comenzaste a escribir?
Empecé a los 11 años, pero no termine nada hasta los 15 años. Lo primero creo que fue un relato corto para un concurso del instituto.
-¿Y cuándo decidiste dar el paso de lanzarte a una novela?
No recuerdo un momento concreto siempre ha sido una meta a conseguir. Supongo que fue gracias al Premio Jordi Sierra i Fabra para jóvenes (menores de 18) que me ayudó a tener un objetivo real.
-¿Qué hay de verdad y qué de ficción en el libro?
Me han preguntado esto muchas veces. Siempre digo que no es autobiográfica, pero reconozco que tiene mucho de mí: Diana es un poco mi yo a los 16 y Anak está inspirado en mi centro de terapia. Lo demás es todo ficción.
-Imagino que no habrá sido fácil sacar el proyecto adelante, ¿tuviste que llamar a muchas editoriales hasta que conseguiste que te lo publicaran?
Fueron cuatro, creo recordar. “Tú también puedes volar” quedó finalista en el premio Plataforma Neo 2014 (que ya es un gran logro), pero no llegó a convencer a la editorial como para publicarlo. Después de eso, tardé un tiempo en volver a confiar en la historia. Antes de que Meiga dijera que sí pasó por otras dos editoriales.
-¿Cuál es tu capítulo preferido?
¡Es una pregunta muy difícil! No puedo elegir, pero reconozco que escribir el capítulo de Anak fue muy divertido. Y todas las intervenciones de Celia en general porque es adorable. Y las partes de cierto personaje sobre el que no puedo hablar porque destriparía el libro.
-¿Habrá una segunda parte de “Tú también puedes volar”?
No. Lo intenté en su momento, pero me di cuenta de que los personajes ya me quedan un poco pequeños (en edad) para los temas sobre los que quiero escribir. Lo que sí habrá seguro es más novelas con el compromiso de visibilizar la discapacidad. Esta novela fue la primera de ese tipo, pero desde entonces todo lo que escribo tiene ese elemento en común y va a seguir teniéndolo.
-¿Con la publicación del libro se ha hecho tu sueño realidad?
Antes creía que el sueño era publicar el libro. Ahora veo que detrás de eso hay muchas cosas que aún sueño con conseguir: firmar en la feria del libro de Madrid, por ejemplo. O vivir de escribir, que es mucho más grande que publicar.
-Al margen de que las personas con discapacidad nos vemos reflejadas en muchos pasajes del libro, a mí personalmente me gusta porque aborda cómo es la sociedad hoy en día, lo que convierte a tu libro en una obra muy moderna y actual.
Pues la verdad es que me alegra mucho, porque habré conseguido mi objetivo. Lo que quería en este libro era visibilizar la discapacidad en la sociedad.
-¿En qué estás trabajando ahora?
Casi te agradezco que no preguntes sobre futuros proyectos, porque es un tema que me agobia un poco. Ahora mismo me cuesta dar con una nueva idea de novela, así que me estoy centrando en relatos (muchos para proyectos benéficos) y espero que alguno vea la luz muy pronto. Todo lo podéis encontrar en mi blog.
